Ahora mismo son las doce y media de la noche, Vero se está duchando y yo ando solo en la habitación del ordenador... Acabo de venir de sacar a la perra y la comida para mañana ya está hecha. Digamos que sólo resta para mí el irme a la cama. Pero sin embargo me apetece escribir.
Hay junto a mí una tarjeta de Daniel Colleman... Es muy bonito el sentir que tienes en tus manos algo que tú has creado, una imagen, un estilo, algo que es puramente tuyo. Y para mí, Daniel Colleman es algo puramente mío, acorde a mis gustos, a mi forma de ser... A quien no le guste probablemente yo tampoco le gustaré, porque en mi trabajo puede reflejarse mi forma de ser por completo, lo que siento, lo que me gusta experimentar, mi estilo y mis gustos por lo sencillo. Estoy muy orgulloso de haber creado esto, para mí significa mucho.
Ahora mismo estoy en uno de esos momentos en los que me apetecería tumbarme a mirar las estrellas. Estoy nostálgico, cariñoso, sensible...
En fin, me voy a la cama...
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