Dios le da pan a quien no tiene dientes

Esta fotografía resume infinidad de cosas importantes...

Las relaciones interpersonales que pasan de lo superficial me parecen increíblemente complicadas. No dependen cien por cien de nuestro comportamiento, no son manipulables y por tanto no es algo que responda lógicamente a un tipo de estímulo. Es más, pueden llegar a ser completamente arbitrarias, ilógicas, impredecibles... porque estamos hablando de personas. Por tanto, en muchas ocasiones, pueden generar sensaciones de impotencia, frustración, insatisfacción o irrealización y esto conlleva una serie de sentimientos.

Ayer estaba con mi pareja y pensé en esto. Estábamos tan contentos y sin más, un comentario mío provocó una reacción que le cambió el humor y por tanto su estado de ánimo instantáneamente.

Esto es algo con lo que convivimos. Diariamente, en nuestras relaciones nos exponemos a cambios de humor, estados de ánimos cambiantes... las personas necesitan una cosa distinta dependiendo del día, no siempre demandan lo mismo y cuando uno tiene una determinada necesidad puede que el otro no esté en condición de corresponder. Esto es así, lo bonito es cuando ambas personas convergen en espacio, tiempo, intensidad y sensación.

Realmente esta forma de pensar es relativamente nueva para mí. Me estoy dando cuenta de que hay muchísimas cosas que escapan a mi control y que muchas veces, me merece más la pena relajarme y entender que no puedo hacer nada por cambiar un suceso que martillear sobre el clavo continuamente para provocar un cambio sin comprender que puedo cargarme su cabeza.

Puede parecer un poco estúpido y así dicho puede pensarse "no es nada nuevo". Bueno, una cosa es leerlo y pensar que es obvio y otra cosa es entenderlo hasta el punto de ponerlo en práctica.

Yo esto lo estoy poniendo en práctica, estoy notando en mí cambios importantes positivos a mejor que me permiten vivir más tranquilamente asumiendo determinadas situaciones y comportamientos en las personas que me rodean. El cambiar me convierte en una persona más flexible que disfruta más de lo que tiene en el momento de tenerlo y se relaja más cuando no lo tiene. Esto es, estoy frenando mi impulsividad y la intensidad continua de mis sensaciones.

Hace unos meses no conseguía esto, ahora sí. Realmente he cambiado tanto en tan sólo 5 años.... y veo que sigo cambiando tanto....

Siento que mi comportamiento va cambiando a medida que voy asumiendo realidades de la vida, realidades de las personas, de su manera de actuar... Me dejo influenciar por aquello que considero me puede mejorar y cada día me intento despojar de aquello que nubla mi mente y entorpece mi relación con las personas y conmigo mismo. Intento llevar una vida positiva y quitar importancia a las cosas...

Pero eso sí, Dios le da pan a quien no tiene dientes. Porque en mi día a día, descubro que la vida es más injusta, las personas no se corresponden como debiesen y la vida no es una máquina en donde se mete una moneda y sale un dulce, sino que se debe de ir metiendo monedas poco a poco y puede que salga un dulce... o no. Sin embargo, puedes tirarte muchísimo tiempo metiendo monedas y no obtener lo que persigues mientras tienes que soportar ver a tu vecino obtener el dulce sin apenas esfuerzo...

Woody Allen lo decía claramente en su película Match Point. La gente no entiende que gran parte de la vida depende de la suerte. En un partido de tenis, en una bola de partido, ésta puede golpear la red y durante una fracción de segundo queda suspendida en el aire. En ese momento, la pelota puede caer en el lado del contrario, y ganas. O puede caer en tu lado, y pierdes.

Así de duro, y de sencillo. Afortunadamente, para mi bien, soy muy feliz.


Un abrazo.