viernes, 5 de febrero de 2010

Mi mujer



Lo reconozco, tengo una vida sexual muy satisfactoria y digamos que a medida que pasa el tiempo, me satisface aún más. Mi mujer es una verdadera maravilla y yo.. hago lo que puedo. Hace tiempo no era así, me sentía frustrado y, estúpidamente, como muchos hombres, culpaba a mi mujer del problema. Llegué a ser una tortura para ella hasta el punto de resignarse y enojarse conmigo. Mi orgullo y ego me impedían reconocer que yo era el problema. No conocía a mi mujer. No sabía qué la gustaba, no recibía porque era incapaz de dar en la dirección adecuada. No hablaba con ella, me limitaba a resignarme asumiendo que el problema no radicaba en mí, sino en su forma de ser y en su forma de comportarse. Extrapolé el problema a otros terrenos perjudicando mi relación. Así, un problema de comunicación se convirtió en una mancha enorme en nuestras vidas. La culpabilizaba de mis frustraciones, de mis fracasos, de mis males, de todo aquello que yo sentía no alcanzaba un cierto grado de satisfacción. Esto la llevó a identificarse como el centro del problema, la causa de mis males y el cáncer de la relación. Llegué a arremeter contra su forma de ser, su forma de vestir y su manera de comportarse. Sufrió muchísimo, por mi culpa.

Somos humanos, y nuestros errores deben de permitirnos avanzar en la dirección correcta, corregirlos y lo más importante, aprender de ellos.

Fueron tiempos muy malos en los que perdí el horizonte, cuestioné mis principios, mi forma de ser, mi actitud y mis formas. No era yo la persona que quería ser. Sin embargo, la fortaleza de mi mujer y su contínuo amor incondicional, consiguió hacerme reaccionar. Yo la dejaba, me separaba de ella, y sin embargo, ella me esperaba, incondicionalmente, pasara lo que pasara. Yo era una veleta, ella era el mástil firme y sólido al que agarrarse. Ambos dudábamos, pero ella no cuestionaba sus ideas, sus sentimientos, yo sí. En su fortaleza y serenidad encontré mi norte, a ella volví cuando ya nada de mí quedaba, reconociendo que yo era el problema, en el mayor acto de humildad que he realizado en mi vida. Vinieron tiempos de reconciliación, en los que fui descubriendo a una mujer mucho más hermosa de lo que antes imaginaba que tenía. Experimenté una forma de besar distinta, una forma de mirar sincera, sin mentiras, transparente. En ella encontré calor y ternura, amor y cariño y lo que es más importante, perdón.

No valoramos a nuestras mujeres lo suficiente. No somos capaces de entender lo que nos llegan a dar.

Mi mujer hoy es lo más hermoso, lo más preciado y lo más poderoso que tengo en mi vida. La forma en que la miro hoy, no es la misma forma en que la miraba antes. Cuando juntos, a solas, nos abrazamos, nuestro amor es la sensación más preciosa e indescriptible que nunca hemos sentido ambos. Nuestro amor, nuestra relación, tiene un valor, es el resultado de un esfuerzo común, del perdón, del reencuentro y del compromiso por continuar.

Como podréis comprender, el mensaje de fondo a este post no es el narraros un problema sexual, sino el camino que recorrí hasta encontrar su solución y el éxito personal que para mí supuso reencontrarme con mi mujer.

Hoy la conozco mejor, si es que alguna vez llegamos a conocer a nuestras mujeres todo lo que ellas se merecen. La entiendo mejor, la escucho más (aunque ella siempre dirá que nunca será suficiente), la cuido más y la protejo más. Una nota curiosa es que antes yo tenía muchos miedos y en la calle me sentía acobardado ante una amenaza. Ahora, me siento seguro, en mí ha nacido un sentimiento por proteger a los míos que antes no conocía.

Nuestras mujeres muchas veces cuidan más de nosotros que nosotros de ellas. Llegamos a comportarnos como sus hijos, más que como sus maridos. No alcanzamos a entender muchas veces sus necesidades, sus insatisfacciones y sus estados de ánimo. Así, nos creemos los capitanes de un barco que no tripulamos nosotros, vivimos nuestro propio sueño. Y ellas, humildes y honradas, nos dejan vivir nuestra historia.


Sinceramente, un hombre no es más hombre por lo que dice, sino por lo que hace.

Yo os invito, desde la proximidad y el cariño, a querer a vuestras mujeres tal y como se merecen, porque lo que experimentaréis superará todas vuestras expectativas.


Un fuerte abrazo.

12 comentarios:

  1. ¡Qué palabras tan bellas! y qué bonito escuchar a un hombre reconocer sus errores. Lamentablemente no son muchos los que actuando como dices que hiciste reconocen sus errores y el amor de la mujer que han tenido siempre al lado. Un besote para tí y otro para Vero. Estoy segura que se merece todo tu amor. No dejes de cuidarla, y si se te ocurre yo le ayudo a ella a pegarte la colleja!

    Buen fin de semana para los dos.

    ResponderEliminar
  2. si yo ya lo sigo diciendo a muchas personas... deja de hablarme de tus éxitos... y comienza a contarme tus fracasos...

    gracias Jo por la colleja! un abrazo y buen fin de semana para vosotros también!!!

    ;)

    ResponderEliminar
  3. Tiene que ser una mujer increíble, de eso estoy totalmente segura. Habéis tenido mucha suerte en encontraros. Qué bonito es suoperar las dificultades juntos. Hace que lo que os une sea infinitamente más fuerte.
    Que sigáis siempre tan bien! :)

    ResponderEliminar
  4. Namasté Daniel,

    Me inclino ante Vero y ante ti...creo que este es el verdadero camino del autoconocimiento. La unión del hombre y la mujer. La bondad, la comprensión, la paciencia...cuando el sentimiento de amor es puro y verdadero, los obstáculos que aparecen, son vencidos por el tensón y la certeza de que debe de ser así. La unión se convierte en un antorcha que guía el mundo.

    Un abrazo sereno para los dos
    Naia

    ResponderEliminar
  5. ¡Hola! ¿Qué tal? Me alegro mucho por ti, por querer y aprender a conocer a tu mujer, no muchos hombres lo consiguen, quizás algunos ni siquiera lo intenten, y no solo por conocerla a ella, sino por tener el valor y la fortaleza de encontrarte a ti mismo, tal y como eres, por aprender para ofrecer lo mejor de ti a quienes te rodean día a día, por reconocer tus errores, asumirlos y darles una solución. Creo que ambos os merecéis el uno al otro. Espero que vuestro amor sea eterno. Sed felices.

    ¡Ah! Me gusta mucho el nuevo diseño que has asignado a tu blog, es original, muy bonito, y por supuesto, me ha emocionado muchísimo la melodía, me encanta, es preciosa.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  7. Felicidades por el valor de reconocer tu error y expresarlo por si le sirve a alguien, espero que así sea, y que este amor os dure para siempre, ahora la base es buena...a veces tener un bache nos hace reaccionar para coger de nuevo el camino recto y Ella de seguro que se alegra enormemente de haber sido paciente, por ello obtuvo su recompensa, dale un Beso de mi parte, no todas tienen la misma suerte...

    Que tengas un estupendo día hoy y todos los sucesivos...
    Un Beso y un Abrazo.

    Paloma.

    ResponderEliminar
  8. M e emociona leerte, sobre todo por ser hombre, y haber sabido reconocer y aceptar lo que estaba al y así poderlo hablar y enderezarlo. Si muchos hablaran así, te puedo asegurar que no se llegaría al distanciamiento que ello conlleva. Un placer leerte. Besos.

    ResponderEliminar
  9. NAHAHYA: efectivamente, cuando hay dificultades el compromiso, la paciencia y el tesón son los ingredientes fundamentales para superarlo. No hace falta que te inclines ante Vero y ante mí... menudo bicho que soy yo ;)

    MIRADA DE ANGEL: efectivamente, por tu foto, tu mirada es de un ángel! tenía ganas de decírtelo! En cuanto a lo que me comentas, muchas gracias en primer lugar por pasarte. Me alegro de verte de nuevo por aquí, hacía ya tiempo, no?

    He de decirte que agradezco tus palabras pero son completamente inmerecidas por mi parte. El valor es puramente de ella. Yo sólo, gracias a un conjunto de factores, conseguí darme cuenta a tiempo de que estaba tirando mi vida por la borda. Así soy de tonto y de inmaduro.

    PALOMA: últimamente te veo mucho por aquí y me gusta! A tí te tengo que responder efectivamente dándote la razón. He tenido valor y es algo de lo que me siento orgulloso. Me siento orgulloso de poder enfrentarme al problema tiempo después con el fin de descargar lastres de mi ser. Ella se alegra en parte... cada vez que ve de nuevo el trasto con el que convive se echa las manos a la cabeza! jajaja. La doy un beso de tu parte, un fuerte abrazo Paloma.

    MYSELF: a mí también me emociona leerte, sobre todo por ser tú! me gusta verte de vuelta por aquí. Espero que todo te vaya bien,

    un abrazote.

    ResponderEliminar
  10. ¡Hola! Pero lo importante es que te diste cuenta a tiempo, conseguiste encontrar donde estaba el problema, y luego le pusiste remedio, conseguiste recuperar aquello perdido, y eso, aunque tu no lo creas, tiene valor y mérito. No es bueno huir de los errores, es mejor recapacitar y aprender del error para en un futuro no volver a cometerlo. Estoy segura que a partir de ahora os ira muy bien.

    Respecto a mis entradas y salidas, estoy ultimamente muy ocupada, me es muy dificil escaparme de mis obligaciones, pero pronto volvere y publicare nuevos sentimientos.

    Un saludo.

    ResponderEliminar

 

Fotografos de Bodas - Daniel Colleman

http://www.squidoo.com/daniel-colleman-fotografos-de-bodas

Fotografo de bodas